Visita, por Chema Caballero

13/01/2010 | Bitácora africana

El domingo pasado llovió, y mucho, por la madrugada, así que la carretera a Makeni estaba toda inundada. Alpha y yo, acompañados de Lion, Mr Bangura y Saidu, el de los clavos, salimos a eso de las nueve de casa. Bruno se quedaba viendo los trabajos y saldría más tarde, sobre las once.

En Rogbere Junction dejamos a los pasajeros que iban a Freetown y nosotros seguimos viaje a Makeni. Allí hemos tenido el programa habitual, a saber: retiro, esta vez predicado por el Padre General, tiempo de reflexión, adoración y cena. Luego yo fui al Seminario menor a saludar a los tres seminaristas de nuestra parroquia que tenemos allí y a hablar con su director, Padre Richard, para ver si puede venir el veintiuno de diciembre a Madina para celebrar un Servicio Penitencial que nos ayude a prepararnos para la Navidad. Luego pasé por la Cantina del Fatima Institute para saludar a algunos de los curas de Makeni y tomar una cerveza con ellos.

La mañana del martes empezó oficialmente con el rezo de laúdes y después del desayuno. Luego fui al Centro Pastoral a entregar la colecta del DOMUND pero todavía no había llegado nadie, así que hice el lleno del diesel, compré algo de verdura que venden junto a la gasolinera: zanahorias, judías verdes y repollos. Llegué un poco tarde al inicio de la primera sesión de la mañana.

A las diez había un descanso y aproveché para volver al Centro Pastoral donde ahora si pude entregar el dinero y comprar hostias y catecismos. Volví para la segunda sesión de la reunión y tras ella fuimos a celebrar la Eucaristía.

Finalmente comimos y yo salí para Madina. Bruno se quedó intentando mandar emails, espero que los que le di con los últimos blogs hayan llegado. En Lunsar me paré a recoger a dos personas que tenían que venir a Madina a poner las baldosas de la farmacia que estamos terminando para que Bruno pueda empezar su proyecto de clínica móvil. Alpha corrió todo lo que pudo y llegamos a Madina a las cinco y media.

Por el camino Alpha me presionó para que llamase a mi hermana Ana para pedirle permiso para darle su nombre a la niña, porque quería hacer el certificado de nacimiento y quería estar seguro que podía ponerle ese nombre. Así que llamé a Ana y esta consintió en que la niña llevase su nombre. Alpha se puso muy contento y me dijo que ya solo quedaba la ceremonia de dar el nombre y que quería hacerla el domingo día veinticinco.

Al llegar a casa tuve el tiempo para cerciorarme de que Medo había limpiado y preparado las dos habitaciones de huéspedes como le había dicho. Estaban perfectas. Luego le di a Mr Samura, nuestro cocinero, los ingredientes para que preparase la cena: pizza.

A las siete y cuarto llegó Bruno con el Padre General, Rino Benzoni, y su consejero, Padre Carlo Girola.

Los dos visitantes han estado en Madina hasta el viernes después del desayuno que Bruno les llevó a Kambia para que puedan visitar esa comunidad.

Han sido dos días de mucha sonrisa, mucho rezar y sobre todo mucho hablar. El diálogo personal con los dos que tuve que hacer duró más de cuatro horas. Ya no sabía que decir. Pero tuve la sensación de que Rino, como buen General, tiene montado un buen sistema de información porque lo sabe todo: desde la existencia de DYES y lo bien que está su página, a los proyectos que se llevan adelante en Madina,…. increíble. Escudriñaron todo, hicieron sacar cuentas y facturas. Dieron ideas sobre la casa nueva, sobre la pastoral, sobre la vida comunitaria, sobre la oración, sobre la gente que viene a misa,…

El jueves por la tarde conseguí sacarles de casa e ir con ellos al campo de fútbol. Había partido internacional: los juveniles del Real Madrid de Madina contra los del Real Madrid de Kukuna. No estuvieron mucho tiempo. Pronto se cansaron y Bruno se los llevó a casa. Yo me quedé hasta el final para saludar a los de Kukuna y ver que el coche que habíamos alquilado para transportarlos no nos la jugaba como otras veces.

Tras la cena del jueves, el Padre General y el Padre Consejero nos dieron un resumen de sus impresiones. Nos dijeron a Bruno y a mí que tenemos que rezar más veces juntos, que una sólo oración en común al día no es suficiente, que tenemos que cuidarnos mejor y no llevar una vida tan espartana, que hay que comer algo más que arroz y plassas, pero que por lo general estaban contentos de lo que habían visto en Madina y del ambiente que se respiraba.

Al Padre Carlo Girola yo no lo había visto en toda mi vida, al Padre General tres veces, cuando estuvo de visita en Sierra Leona hace seis años, cuando estuve en el curso de reciclaje en el 2002 en Italia y ahora. En el fondo son desconocidos que se entrometen en tu vida. Pero visto desde el punto de vista de la familia javeriana creo que la visita ha sido muy cordial y positiva. Nos han ayudado a reflexionar juntos a Bruno y a mí y eso siempre ayuda.

Cuando el viernes por la mañana los despedí en la puerta de la misión me di cuenta que me dolía la comisura de los labios de tanto sonreír y me relajé un poco. Luego fui a Wonkifore a llevar a Pa Konko para que comenzase a pintar la escuela y de vuelta a Madina fui al lumah a comprar.

Cuando llegué a casa me tumbé en la cama porque me encontraba muy cansado. Allí me encontró Bruno cuando a la una y media de la tarde regresó de Kambia. Creo que una vez pasada la tensión de la visita el cuerpo se había relajado y por eso me sentía cansado. Fueron dos días de estar pendiente de cada palabra, de la misa, lo que predicaba, la oficina, el trabajo ordinario,…

Ahora volveremos a vernos las caras el día dos de diciembre cuando volvamos a Makeni para el Capítulo Regional.

En cuanto al país todo sigue adelante. El jueves fue la Inaguration, la toma de posesión, del nuevo gobierno y se concedió fiesta a todo el país. En Freetown se celebró una gran fiesta en el Estadio Nacional. Aquí en Madina sólo se notó porque no hubo colegio. Tonko Limba ha sido agraciado con dos Ministros originarios de estas partes, el de Agricultura, Sam Sesay y el de Administraciones locales, Dauda Kamara. Todo el mundo espera a que estos dos den la vuelta al Tonko Limba.

Autor

  • Caballero, Chema

    Chema Caballero nacido en septiembre de 1961, se licenció en derecho en 1984 y en Estudios eclesiásticos en 1995 Ordenado Sacerdote, dentro de la Congregación de los Misioneros Javerianos,
    en 1995. Llega a Sierra Leona en 1992, donde ha realizado trabajos de promoción de Justicia y Paz y Derechos Humanos. Desde 1999 fue director del programa de rehabilitación de niños y niñas soldados de los Misioneros Javerianos en Sierra Leona. En la , desde abril de 2004 compaginó esta labor con la dirección de un nuevo proyecto en la zona más subdesarrollada de Sierra Leona, Tonko Limba. El proyecto titulado “Educación como motor del desarrollo” consiste en la construcción de escuelas, formación de profesorado y concienciación de los padres para que manden a sus hijos e hijas al colegio.

    Regresó a España donde sigue trabajndo para y por África

    Tiene diversos premios entre ellos el premio Internacional Alfonso Comín y la medalla de extremadura.

    Es fundador de la ONG Desarrollo y educación en Sierra Leona .

    En Bitácora Africana se publicarán los escritos que Chema Caballero tiene en su blog de la página web de la ONG DYES, e iremos recogiendo tanto los que escribió durante su estancia en Sierra Leona, donde nos introduce en el trabajo diario que realizaba y vemos como es la sociedad en Madina , como los que ahora escribe ya en España , siempre con el corazón puesto en África

    www.ongdyes.es

Más artículos de Caballero, Chema