Un continente infeliz, Por Chema Caballero

18/04/2012 | Bitácora africana

“Se ve que son muy pobres, pero la sonrisa de los niños nos muestra los felices que son aquí, ya quisiéramos nosotros ser tan felices como ellos”. ¿Quién, viviendo en África o enseñando las fotos de sus aventuras, no ha tenido que oír esta afirmación u otras similares? El tópico de la felicidad de los negritos -son felices con lo poco que tienen- parece no ser verdad. Todo indica que, también en esto, nos tenían muy engañados. O al menos, así lo ponen de relieve unos expertos que han demostrado que los países menos felices del mundo están en África subsahariana.

Un informe titulado World Happines Report, publicado hace pocos días, asegura que 8 de los 10 países más infelices del mundo son africanos: Togo, Benín, República Centroafricana, Sierra Leona, Burundi, Islas Comoras, Tanzania y Congo Brazzaville.
El estudio se hizo público en la sede de Naciones Unidas con motivo de la celebración, el pasado 2 de abril, del encuentro sobre Wellbeing y Happiness: Defining A New Economic Paradigm. La reunión responde a una Resolución de la Asamblea General de la ONU adoptada en julio de 2011. Esta fue aprobada bajo la iniciativa del reino de Bután y tiene como objetivo animar a los distintos gobiernos a promover la felicidad de sus ciudadanos.

La clave de todo esto parece pivotar sobre la afirmación de que la felicidad no tiene que depender de la economía y por eso se buscan fórmulas para medir este estado de ánimo más allá de los baremos monetarios.

El estudio asegura que los países más felices del mundo son los nórdicos: Dinamarca, Noruega, Finlandia y Holanda y que los más infelices, como hemos visto, están en África subsahariana. Para, a continuación, decir que la riqueza no tiene nada que ver con la felicidad.
El informe ha sido editado por tres prestigiosos estudiosos: John Helliwell, de la Universidad de British Columbia, Richard Layard, cofundador de Action for Happiness, y el profesor de económicas Jeffrey Sach.

Algunas de las conclusiones del informe son:

• Que no solo la riqueza nos hace felices, también cuentan la libertad política, la existencia de una estructura social fuerte y la ausencia de corrupción, entre otros factores.

• A nivel individual, el poseer una buena salud mental y física, tener un trabajo y ser parte de una familia estable son elementos esenciales.

• El paro es una de las principales causas de infelicidad.

• El crecimiento económico de un país no determina la felicidad de sus habitantes.

• En los países desarrollados las mujeres tienden a ser más felices que los hombres, mientras que en los más pobres no está tan claro.

• Las personas de mediana edad tienden a ser más infelices.

La falta de verdadera libertad política, la corrupción, la ausencia de servicios públicos de salud, la carencia de una red de salud mental, las altas tasas de paro (sobre todo juvenil que en algunos países llega al 80%), el gran índice de analfabetismo…, pueden ser factores que expliquen por qué los países más infelices del mundo se encuentran en África subsahariana.

Sin embargo, de la lectura del texto surgen algunas dudas. Por ejemplo, si los países más felices son los más ricos y los más infelices los más pobres, entonces algo tendrá que ver la economía, la distribución de la riqueza…, en todo esto. Para que un país sea más feliz debe acercarse al pleno empleo o dar buenos servicios sociales a sus ciudadanos y eso depende mucho de la riqueza del estado, creo yo.

Otra cosa que no me cuadra de este estudio es que si la economía no tiene tanta influencia en la felicidad de las personas por qué la conferencia a la que el informe sirve de apoyo se basa en buscar un nuevo paradigma económico que será presentado en la Cumbre de Río+20 que, organizada por Naciones Unidas, se celebrará el próximo mes de junio para hablar sobre desarrollo sostenible. Así podríamos seguir, pero tampoco viene al caso.

Parece que de los distintos elementos señalados por los expertos, lo único que les quedaría a los africanos es la familia. Pero también hay mucho mito sobre este tema. La famosa familia amplia africana, que se alaba como modelo de solidaridad y apoyo, en bastantes ocasiones se convierte en una carga para el individuo que ha conseguido un trabajo y en uno de los principales elementos por el que muchas personas no pueden progresar económicamente en sus vidas.

Posiblemente, el aspecto positivo de este informe es que pone de manifiesto que los gobernantes deben prestar más atención a políticas que primen la felicidad de los ciudadanos junto con la reducción de la pobreza. También refuerza lo que desde hace algún tiempo algunos economistas y sociólogos vienen señalando: que el Producto Interior Bruto (PIB) de los países no refleja en su totalidad la situación económica y social de los ciudadanos y que por eso hay que buscar nuevos instrumentos de medición.

Se podría recurrir al de Felicidad Interior Bruta (FIB), aquel indicador propuesto por Jigme Singye Wangchuck, en 1972, cuando era rey de Bután. Esto es algo que subyace constantemente en el informe.
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Sea como sea, la realidad es que de los 156 países de los que habla el estudio el más feliz del continente africano parece ser Islas Mauricio que aparecen en el puesto 64 de la lista. El siguiente, en el puesto 71, es Argelia. Son los dos únicos que están por encima de la mitad del elenco. Grandes países como Sudáfrica (96) y Nigeria (100) o los representantes del milagro económico africano Ghana (108) o Angola (135), están mucho más abajo. Y, para terminar con las estadísticas, de los 52 países más infelices del mundo, 34 son africanos.
Para los curiosos, España ocupa el puesto 22, por encima de Alemania, que está en el 30, a pesar de tener mucho menos paro y mejores servicios sociales que nosotros.

Aquí va la lista de los distintos países africanos estudiados (no están todos) y el lugar que ocupan, según el informe, para que cada uno saque sus propias conclusiones:

64 Islas Mauricio

71 Argelia

81 Libia

87 Túnez

90 Sudáfrica

95 Yibuti

97 Namibia

100 Nigeria

101 Egipto

105 Marruecos

108 Ghana

109 Zambia

110 Mozambique

111 Somaliland

113 Mauritania

114 Malaui

117 Botsuana

124 Sudán

125 Senegal

126 Camerún

128 Uganda

129 Madagascar

132 Ruanda

133 Costa de Marfil

134 Kenia

135 Angola

136 Guinea

137 Níger

139 Etiopía

140 Liberia

141 República Democrática del Congo

142 Zimbabue

143 Malí

144 Burkina Faso

145 Chad

148 Congo Brazzaville

149 Tanzania

151 Islas Comoras

152 Burundi

153 Sierra Leona

154 República Centroafricana

155 Benin

156 Togo

original en: Blogs de El País – África no es un País

Autor

  • Caballero, Chema

    Chema Caballero nacido en septiembre de 1961, se licenció en derecho en 1984 y en Estudios eclesiásticos en 1995 Ordenado Sacerdote, dentro de la Congregación de los Misioneros Javerianos,
    en 1995. Llega a Sierra Leona en 1992, donde ha realizado trabajos de promoción de Justicia y Paz y Derechos Humanos. Desde 1999 fue director del programa de rehabilitación de niños y niñas soldados de los Misioneros Javerianos en Sierra Leona. En la , desde abril de 2004 compaginó esta labor con la dirección de un nuevo proyecto en la zona más subdesarrollada de Sierra Leona, Tonko Limba. El proyecto titulado “Educación como motor del desarrollo” consiste en la construcción de escuelas, formación de profesorado y concienciación de los padres para que manden a sus hijos e hijas al colegio.

    Regresó a España donde sigue trabajndo para y por África

    Tiene diversos premios entre ellos el premio Internacional Alfonso Comín y la medalla de extremadura.

    Es fundador de la ONG Desarrollo y educación en Sierra Leona .

    En Bitácora Africana se publicarán los escritos que Chema Caballero tiene en su blog de la página web de la ONG DYES, e iremos recogiendo tanto los que escribió durante su estancia en Sierra Leona, donde nos introduce en el trabajo diario que realizaba y vemos como es la sociedad en Madina , como los que ahora escribe ya en España , siempre con el corazón puesto en África

    www.ongdyes.es

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