Lo que está ocurriendo en Goma, capital del Kivu norte, al este de la R.D. del Congo, grita al cielo como terrorismo de estados y como hipocresía internacional.
Desde 1995, Ruanda ha controlado el este de la R.D. del Congo, para aprovecharse de sus enormes riquezas naturales y minerales, bajo la excusa de perseguir a los enemigos de su propio país.
Los crímenes contra la humanidad que se han producido, primero en Ruanda en 1994, (unos 800.000 victimas de la guerra civil) y desde entonces en el este de la R.D. del Congo (unos 8.000.000 victimas, según diversos informes de la ONU, Le Potenciel RDC del 20.11.2012), causados por diferentes grupos terroristas, como el M23, apoyados sobre todo por Ruanda, constituyen los mayores genocidios desde la segunda guerra mundial.
Se añade la gravedad de que estos crímenes se siguen cometiendo impunemente y hasta con la aprobación tácita de los grandes poderes y de la misma ONU, que llega incluso a admitir al gobierno de Ruanda en el consejo de Seguridad de la ONU.
Se pillan la mano los grandes poderes de EEUU, Inglaterra y Francia al apoyar a los gobiernos fuertes de la región de los Grandes Lagos: Ruanda y Uganda. Ahora todos pueden seguir saqueando, sin grandes molestias, los inmensos yacimientos de oro, koltan, petróleo etc., aunque sea a costa de millones de muertos y de cientos de miles de refugiados que corren para sobrevivir.
Tanto los gobiernos de la región, como los extranjeros, siguen negando su apoyo a la violencia y su enriquecimiento, esperando que alguien les pueda creer, porque de valores éticos y de conciencia, andan muy escasos.
Los habitantes de Goma sufren, y los medios de comunicación prefieren mirar a otro lado. ¿Porqué los medios de comunicación siguen callados sobre las tragedias que sobre todo Ruanda sigue causando en esa región? ¿Quiénes y cuántos se benefician de los tesoros de la región de Kivu, para que intenten justificar tanta sangre y sufrimiento? Los que tiran la piedra y esconden la mano, y los que se callan, algo tendrán también que responder delante de la Humanidad y de la Historia.
Se teme que esta ofensiva en Goma se extienda hacia el norte: Butembo y hacia el sur: Bukavu, e incluso hacia otras regiones de la R.D. del Congo. Y todo este sufrimiento, por ser un país tan rico!
La explotación de las riquezas del Congo de forma ilegal y violenta tiene prioridad por encima de la las vidas humanas, para los gobiernos de la región y para las potencias internacionales, e incluso para la ONU, que no hace sino ladrar un poco.
Las actuales negociaciones de Kigali, Kampala y Kinshasa con el M23, que solo llegan después de la toma de Goma, parecen un montaje hipócrita para la galería.
Todos somos responsables de nuestros propios actos.
