Sudáfrica está trabajando para permitir que todos los ciudadanos africanos ingresen al país sin visas, pero en un primer momento «viajeros de confianza» como diplomáticos, funcionarios, académicos, empresarios y estudiantes serán los únicos en beneficiarse.

El Departamento de Asuntos Internos describe las medidas que se adoptarán para eliminar los requisitos de visado en su último Libro Blanco sobre la migración internacional, que fue aprobado por el gabinete hace seis semanas, pero que aún no se ha hecho público.

La Agenda 2063 de la Unión Africana, defendida por Nkosazana Dlamini-Zuma, expresidente de la Comisión de la Unión Africana, pide el desmantelamiento de los requisitos de visado para todos los ciudadanos africanos que viajan por el continente en 2018 basándose en los puntos de vista del Renacimiento Africano.

El pasaporte africano fue lanzado con gran ceremonia por Dlamini-Zuma y el presidente ruandés Paul Kagame en la cumbre de la UA del año pasado en Kigali.

De acuerdo con el Libro Blanco, Sudáfrica «apoya plenamente la visión de una África donde sus ciudadanos puedan moverse más libremente a través de las fronteras nacionales, donde se alienta el comercio intraafricano y haya una mayor integración y desarrollo del continente africano». Según el Departamento de Asuntos Internos el estado actual es insostenible. «Por ejemplo, en promedio los africanos necesitan visas para viajar al 55% de otros países africanos. Pueden obtener visas a su llegada en sólo el 25% de otros países. Por último, no necesitan visa para viajar a sólo el 20% de los demás países del continente «.

Enfoque basado en la seguridad

Pero el Libro Blanco, que mueve el enfoque de Sudáfrica de la inmigración de un enfoque puramente administrativo a un enfoque basado en la seguridad, advierte que el desguace del sistema de visas debe ocurrir con cautela. El enfoque basado en el riesgo de Sudáfrica «aboga por una eliminación gradual de los trámites migratorios para viajeros frecuentes y de confianza, incluidos diplomáticos, funcionarios, académicos, personas de negocios, estudiantes, etc». La política está concebida de la siguiente manera: los ciudadanos africanos pueden entrar en Sudáfrica sin visado donde existen acuerdos recíprocos.

Los visados ??sólo se necesitarán cuando exista el riesgo de que los extranjeros se queden más tiempo, los riesgos de seguridad como la delincuencia organizada, el terrorismo y la inestabilidad política, los riesgos de registro civil, es decir, el fraude de los gobiernos extranjeros en la expedición de documentos o la incapacidad o idoneidad de identificar a sus nacionales cuando se les solicite para los países «con un elevado número de nacionales que abusan del sistema de asilo».

Los elementos clave del régimen de exención de visados ??serían la entrada sin visados ??para visitas de hasta 90 días, el reconocimiento de visados ??para terceros, por ejemplo visados ??regionales, normas acordadas sobre inmigración y gestión fronteriza, Gestión de riesgos en tiempo real, intercambio de información e inteligencia «.

Donde se requieran visados ??»Sudáfrica debería hacer lo más fácil posible para que los viajeros de buena fe ingresen a Sudáfrica», mediante la estandarización y ampliación del uso de visas de largo plazo de entrada múltiple para viajeros frecuentes, empresarios y académicos, de acuerdo con el Libro Blanco.

Se elaborará una lista de países cuyos sistemas de acreditación de visados ??son reconocidos por Sudáfrica, y la tecnología se utilizará para establecer esquemas de viajeros de confianza.

Libre circulación de los ciudadanos africanos

A nivel regional, Sudáfrica «debería seguir promoviendo la libre circulación de los ciudadanos africanos», señala el documento.

Sin embargo, también dice que ha habido una gran afluencia de migrantes económicos no cualificados que no pudieron obtener visas y permisos a través del «régimen de inmigración actual». Estos problemas tuvieron algunas consecuencias negativas, como el que el sistema de gestión de los solicitantes de asilo fuera «abusado y abrumado por los emigrantes económicos», y luego estos inmigrantes y, por extensión, también los trabajadores sudafricanos fueron abusados ??por «algunos empleadores sin escrúpulos de Sudáfrica».

También ha habido «un aumento del comercio de documentación falsa y de corrupción por parte de agentes policiales y de policía de inmigración», y la cohesión social ha sufrido «ya que todos los ciudadanos asumen que todos los migrantes del resto de África son irregulares e indeseables». También ha habido una «puerta giratoria» de los migrantes que vuelven, y las deportaciones a los países vecinos aumentan significativamente.

El Libro Blanco, que se centra fuertemente en atraer a migrantes más cualificados para contrarrestar la fuga de cerebros, también anuncia una dispensa especial para los migrantes de la Comunidad de Desarrollo del África Meridional, con el objetivo de otorgar visados ??a migrantes cualificados, comerciantes y pequeñas y medianas empresas. Los visados ??para los migrantes con menos calificaciones serán «basados ??en cuotas», pero los detalles sobre esto todavía tienen que ser decididos.

La ministra de Relaciones Exteriores, Hlengiwe Mkhize, anunció el pasado miércoles los detalles de la nueva dispensación de inmigración en su discurso sobre el presupuesto en el Parlamento. Se espera que la nueva política llegue a la legislación el próximo año

Fuente: News24

[Traducción y edición, Fernando Martín]

[Fundación Sur]

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