Ruanda ¿Qué ambiente precede a las elecciones?, por Antonio Molina

6/07/2010 | Bitácora africana

Hace un par de meses, un compañero, que lleva casi 50 años en este pequeño país del corazón de África, me confidenciaba: “En Ruanda reina la paz de los cementerios. Si quieres que los partidarios del FPR de Kagame te dejen en paz, tienes que permanecer callado pase lo que pase y veas lo que veas.” La gente de a pie, en su mayoría perteneciente a la etnia “Hutu”, que es el 85% de la población, anda “acojonada” por causa de las denuncias…Es suficiente que le caigas antipático a un vecino “tutsi” para que te denuncie como “negacionista” y “opositor”…

En esta dictadura no hay lugar para los que discrepan del partido en el poder. La oposición es hostigada y perseguida todos los días, de todas las maneras y con todos los medios que el poder tiene a su alcance.

GRAVES RESPONSABILIDADES Y COMPLICIDADES EN LA ONU

Kagame tiene poderosos padrinos en la ONU y entre los países occidentales, que son quienes más se benefician del pillaje de los minerales estratégicos robados en el Congo oriental.

Desde el 1 de octubre de 1990, el FPR de Paul Kagame y, en menor medida, el ejército ugandés de Yoweri Museveni, han cometido en Ruanda y Congo los mayores crímenes desde la 2ª Guerra Mundial. Por la violencia directa o consecuencias colaterales, han perdido la vida más de 8 millones de personas, casi todos civiles, en su mayoría mujeres, niños y ancianos.

¿Cómo semejante tragedia ha suscitado tan escasa atención en nuestro mundo? ¿Cómo, en cambio, se sigue hablando de las 800.000 víctimas tutsi asesinadas en Ruanda en abril de 1994 a manos de los extremistas hutu? Una respuesta escueta y centrada en lo más fundamental podría ser ésta: Tal farsa y tal barbarie sólo es posible por la complicidad y encubrimiento de las Naciones Unidas, manipuladas por los grandes Estados, que más se benefician del pillaje de los excepcionales recursos naturales del Congo. Esto se asemeja a la explotación que hace Israel del genocidio perpetrado por los nazis de millones de judíos durante la 2ª Guerra Mundial, mientras ellos hacen peor con los palestinos en la banda de Gaza.

LA QUERELLA ESPAÑOLA

El 6 de febrero de 2008, se produjo un acontecimiento decisivo: la emisión del auto dictado por un Magistrado de la Audiencia Nacional Española, Fernando Andreu Merelles, en el que decretó prisión para 40 máximos cargos del FPR. Es un acontecimiento cuyas consecuencias a favor de esos dos pueblos son cada vez más reales y eficaces. Los delitos son los más graves posibles: genocidio, lesa humanidad, terrorismo… El presidente Kagame se escapa, por estar en el ejercicio de la Presidencia de la República. El 17 de febrero de 2009, el mismo magistrado requirió a las Naciones Unidas algunas de las pruebas, que sobre ese gran pillaje, obran en su poder.

DESPRESTIGIAR E INCLUSO CRIMINALIZAR A LOS QUERELLANTES

Un Grupo de Expertos creado por el Consejo de Seguridad de la ONU ha emitido un informe acusando a la Fundación S’Olivar, promotora de la querella criminal y a la asociación Inshuti, de financiar los FDLR – grupos armados que operan en el Este del Congo. Como bien saben hacerlo los agentes del FPR, la orquestación mediática ha sido perfecta. Primero el diario oficioso de la dictadura ruandesa, el The Kigali New Times publicó unas filtraciones periodísticas, que después reprodujeron los periódicos españoles PÚBLICO y EL PAÍS.

Todo esto confirma las conclusiones del encuentro, en La Haya, de 120 expertos juristas internacionales y abogados del Tribunal Internacional para Ruanda (TPIR). Las intervenciones de estos expertos partían de las declaraciones de Carla del Ponte, antigua fiscal del TPIR, apartada de su cargo por los EE.UU. y por Gran Bretaña, en las que denunciaba las manipulaciones de estas dos potencias para encubrir los crímenes masivos del Gobierno Ruandés y asegurar su impunidad.

En paralelo está la actuación del Gobierno Español pretendiendo quitarle hierro al asunto y la visita del Secretario de Estado de Exteriores, Angel Lossada, a Kigali y del Ministro de Justicia ruandés a Madrid. Fueron también los periódicos PÚBLICO y EL PAÍS los encargados de “demostrar” las motivaciones políticas de Merelles y el apoyo de las dos ONGs españolas querellantes a grupos armados en el Congo. Acusaban a “la Iglesia”, a “curas católicos”, a “religiosos españoles” de financiar y apoyar a la guerrilla hutu.

Es cosa clara que Naciones Unidas colabora estrechamente con el FPR para desprestigiar e incluso criminalizar a los promotores de la querella criminal. No sólo oculta informes demoledores para el FPR y para las grandes potencias que lo sostienen y encubre los grandes intereses mineros en el Congo, sino que varios de los 40 altos cargos ruandeses, buscados por la justicia española, ocupan o han ocupado cargos de responsabilidad en la ONU.

DECLARACIÓN PÚBLICA DE AMNISTÍA INTERNACIONAL

A.I. expresa su más enérgica condena a las restricciones a la libertad de expresión en Ruanda en un momento en que el país se prepara para las elecciones presidenciales de agosto próximo.

Las autoridades ruandesas han atacado recientemente en sus discursos a las organizaciones internacionales de los Derechos Humanos, incluidas Amnistía Internacional y Human Rights Watch (HRW) y la prensa adicta al gobierno ha publicado artículos y editoriales intentando desacreditar su trabajo.

El 21 de abril, la candidata a la presidencia, Victoire Ingabire, fundadora de Fuerzas Democráticas Unidas (FDU-Inkingi), formación política que solicita ser inscrita en Ruanda, fue detenida, acusada de “ideología negacionista del genocidio”, de divisionismo y colaboración con un grupo “terrorista”. Ingabire quedó en libertad al día siguiente, mientras prosiguen las actuaciones judiciales. En el juicio, la acusación tendría que probar que sus afirmaciones constituyen una apología del odio, para demostrar que no está siendo castigada por su oposición política. También tendrá que demostrar que la propia Ingabire perpetró un acto delictivo reconocible. Todo es posible en Ruanda, donde los testigos falsos están a la orden del día.

Como intimidación la sede de su organización fue asaltada por jóvenes partidarios de Kagame y el secretario de organización recibió una gran paliza.

He aquí algunas de sus declaraciones al llegar al aeropuerto de Kigali,después de 16 años de exilio.”El genocidio se llevó casi un millón de ruandeses, massacres posteriores a gran escala han causado la muerte de otros numerosos miles de nuestros conciudadanos. No hay ninguna familia que no esté en duelo. Pero la población sigue esperando en medio de la angustia y del miedo una real política nacional de unidad y reconciliación.

Regreso para lograr la paz y es la PAZ la que guiará mi acción política para erradicar la injusticia y para romper todas las cadenas que nos aprisionan. Hemos creado en el exilio una formación política y hemos hecho política entre los exilados. Es tiempo ahora de proseguirla en nuestro país, para iniciar juntos una política contra todas las formas de injusticia y para la instauración de una verdadera democracia basada en la libertad de todos. Vuestros parientes, amigos y conocidos en el exilio comparten el mismo combate en esta lucha por el cambio.

Comenzamos un largo camino, una verdadera revolución, que no terminará con la elección presidencial. ¡Despertad! ¡Renunciad al miedo y liberémonos pacíficamente! Juntos venceremos.”

Ante estas declaraciones a cara descubierta, admiramos la valentía de quien se llama “Victoire”…Pero estas palabras del más puro estilo democrático deben haber sonado a los oídos del régimen de Kagame a una declaración de guerra… Ya hemos visto como han reaccionado… y lo que aún vamos a ver…

POSICIÓN DEL SENADO ESPAÑOL

El 11 de marzo de 2010,se aprobó por unanimidad en la Comisión de Exteriores del Senado, la moción siguiente: “El Senado insta al Gobierno a que proponga a las autoridades ruandesas, tanto a través de las instancias de la Unión Europea, como a través de las Naciones Unidas, el envío urgente de observadores internacionales a Ruanda, con el objetivo de garantizar la limpieza del proceso electoral y la integridad física de todos los candidatos.”

CONCLUSIÓN

El PFR está nervioso por causa del Diálogo Intra Ruandés promovido por la Fundación S’olivar, que al ser totalmente no-violenta y haber recibido el apoyo unánime del Parlamento Español, resulta muy incómoda para la dictadura ruandesa. Las semanas venideras serán transcendentales para saber si el PFR está dispuesto o no a jugar el juego democrático limpiamente, aceptando la presencia de observadores internacionales, garantizándoles libertad de movimientos, pues es en las “colinas” donde se fraguan los fraudes.

Autor

  • Molina Molina, Antonio José

    Antonio José Molina Molina nació en Murcia en 1932. Desde 1955 es Misionero de África, Padre Blanco, y ya desde antes ha estado trabajando en, por y para África. Apasionado de la radio, como él relata en sus crónicas desde sus primeros pasos en el continente africano, "siempre tuve una radio pequeña en mi mochila para escuchar las noticias". Durante septiembre 2002, regresa a Madrid como colaborador del CIDAF. En octubre de 2005 aceptó los cargos de secretario general de la Fundación Sur y director de su departamento África. Antonio Molina pertenece -como él mismo dice- a la "brigada volante de los Misioneros de África", siempre con la maleta preparada... mientras el cuerpo aguante.

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