Ruanda: Eugène Uwambajimana, nueva víctima de la segregación

14/02/2011 | Opinión

Eugène Uwambajimana es ese estudiante del Kigali Institute of Education que se ha suicidado el 31 de enero de 2011, tras habérsele cortado la beca universitaria. Su pecado original: haber nacido hutu y en consecuencia no ser «un buen huérfano».

Un “superviviente” entre los supervivientes.

Eugène Uwambajimana no tenía más que dos años cuando perdió a sus dos padres. Fue acogido por su tío como si fuera su propio hijo. De condición modesta, creyó que tenía derecho a una beca otorgada a los alumnos huérfanos indigentes. No contaba con la máquina destructora puesta en funcionamiento por el sistema FPR para discriminar una parte de muchachos ruandeses. El Estado ha puesto en pie un Fondo de ayuda a huérfanos para ayudarles en los estudios. Este fondo es alimentado por donantes y por todos los ruandeses que deben cotizar. Se llama FARG (Fondos de Ayuda a los Supervivientes del Genocidio). ¿Cómo se hace la selección de los beneficiarios? Como oficialmente no se puede hablar abiertamente de hutu y tutsi, aunque para el FPR sólo los niños tutsi pueden beneficiarse de esta ayuda, es la Asociación de Estudiantes Supervivientes del Genocidio el organismo encargado de declarar “éste no es de los nuestros” y designar lo beneficiarios. Es lo que le ha sucedido a Eugène Uwambajimana. Era huérfano, pero no “un buen huérfano” y su pecado original, el de ser hutu.

Pero la elite tutsi no solo ha saqueado el fondo de ayuda a huérfanos, alimentado sin embargo por toda la población, y ha excluido a los huérfanos hutu de la instrucción. El régimen ha generado miles de huérfanos en sus campañas de limpieza de determinadas zonas; ha recogido a todos los niños de la calle, naturalmente huérfanos hutu, y los ha deportado a la isla Iwawa en medio del lago Kivu, donde al parecer recibirían instrucción militar, sin duda para convertirlos en carne de cañón en esas guerras regionales que le gustan tanto a Kagame.

Ojalá la muerte de Eugène Uwambajimana abra los ojos de quienes se obstinan en sostener uno de los regímenes más represivos y corrompidos del mundo, de los donantes unos fondos que favorecen la discriminación, y que los verdaderos patriotas se despierten y digan “basta” a una camarilla de bandidos que tiene desde hace 16 años al país como rehén.

Emmanuel Neretse

Fuente: www.musabyimana.be, 04/02/2011.

Traducción y resumen: Ramón Arozarena.

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