Mirando a la situación actual, se pueden constatar progresos considerables en numerosos países africanos, que podrían augurar una mayor estabilidad democrática, así como un mayor desarrollo integral y paz.
Es evidente que la economía africana sigue creciendo, aunque esto favorezca a una minoría. El potencial humano de una población joven, cada día mejor educada, supone su mejor garantía para el futuro. Con una población de 1.100 millones de habitantes, la edad media es de 17-18 años. La democracia sigue enraizándose en numerosos países: Kenia, Burkina, Mali, Nigeria, Suráfrica, Malawi, Tanzania, Mauricio, Cabo verde etc. Aunque es verdad que todavía reinan en África 23 regímenes autoritarios. Los abundantes recursos naturales y minerales de África constituyen un enorme potencial, al mismo tiempo que son su principal riesgo, como se ve en: R.D. del Congo, Sudan, Uganda, etc.
Existen otros indicadores, como: el tráfico de armas, capitalismo inhumano, grupos fundamentalistas, gobernanza egoísta y dictatorial, tráfico de personas etc., que presagian tiempos difíciles para África, durante el nuevo año.
El 95% de las armas ligeras que circulan en el continente africano, proviene del exterior. Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz (SIPRI), con sede en Estocolmo, el tráfico de armas alcanzó en 2009, los 400.000 millones de dólares y aumenta un 8% cada año. Entre los 100 países exportadores de armas, el 90% son estadunidenses o europeos. La falta de transparencia de los gobiernos en este tráfico de armas, hace de África la zona más vulnerable y difícil para investigar y controlar.
Según el escritor Argelino Boualem Sansal, el islamismo (ideología) está en vías de remplazar el islam como religión, en varios países de África. El ansia de poder junto con ideologías fundamentalistas (religiosas, tribales, político-económicas) presentan un reto serio para la convivencia pacífica en varios países de África.(Nigeria, Sudan, R.D. del Congo, Somalia, R. Centroafricana, Egipto etc.). Lo mismo piensa David Richards (ex jefe del gabinete de defensa del Reino Unido)
A pesar de todo, ¿Podemos esperar, de forma realista, que el desarrollo integral y la Paz se vayan enraizando en África, y el mundo?
Pienso que la inmensa mayoría de la población, en África y en el mundo, somos gente de bien y de paz. Creo que también estamos de acuerdo, con el Papa Francisco, que la FRATERNIDAD es el camino y fundamento, para superar la violencia, la pobreza y otras esclavitudes, y para construir juntos un nuevo mundo, más humano, justo y fraterno.
Está a nuestro alcance construir un mundo sin privilegiados ni excluidos, sin triunfadores egoístas, ni victimas sin derechos ni dignidad, porque Dios se ha puesto de nuestro lado, para que todos los seres humanos vivan dignamente.
Aquí reside el reto: ¿Cómo miramos y como tratamos a los demás, sobre todo a los más marginados?. ¿Cómo preparamos a los jóvenes para ser líderes íntegros del mañana?. ¿Cómo nos comprometemos a construir, no a politizar, una sociedad más equitativa y armoniosa?.
En la respuesta que todos vayamos dando a estas preguntas, sabremos si la Paz llegará gradualmente aquí, en África, y en el mundo entero.
Un mundo más humano es posible ciertamente. Lo que predomina es la gente buena y de paz. El Reino de fraternidad, de justicia y de paz está entre vosotros.
Sabemos el camino y la respuesta está en nosotros-as: “Abacwezi njuna, n’agaawe oteireho”, como dicen los Banyoro-Batoro en Uganda. ( A Dios rogando y con el mazo dando).
FELIZ Y PRÓSPERO 2014.
