La sombra de las urnas y de las armas sobre los Grandes Lagos Elementos de análisis y reflexión sobre la democratización en África central tras dos años electorales 2010-2011, por Kris Berwouts

10/07/2012 | Blog Académico

«La sombra de las urnas y de las armas sobre los Grandes Lagos Elementos de análisis y reflexión sobre la democratización en África central tras dos años electorales 2010-2011″ es una traducción y resumen(*) del escrito de Kris BERWOUTS « L’ombre des urnes et des armes sur les Grands Lacs » – Éléments d’analyse et de réflexion sur la démocratisation en Afrique Centrale après deux années électorales 2010-2011 –
Se puede descargar el texto original: http://www.ingeta.com/lombre-des-urnes-et-des-armes-sur-les-grands-lacs/
->http://www..ingeta.com/lombre-desurnes-et-des-armes-sur-les-grands-lacs/ ] informe que el Sr. Kris Berwouts escribió a petición de la red europea de ONG EurAC, de la que fue en su día director.

* Traducción y resumen realizado por Ramón Arozarena

2010 y 2011 han sido años cargados de elecciones en África Central (Ruanda, Burundi, RDC, Chad, Centroáfrica, Uganda). Todas ellas han confirmado y renovado la legitimidad de los dirigentes salientes.

En este informe se analiza el proceso de tres países. En Ruanda, el 9 de agosto de 2010, el presidente saliente, Paul Kagame, obtuvo el aplastante resultado del 93% de los votos, frente a tres candidatos “satélites” que mostraron una oposición y un pluralismo de fachada. En periodo preelectoral el régimen combatió la oposición, sobre todo a la candidata Victoire Ingabire, cuyo mensaje claro y directo atraía grandemente la atención. En marzo de 2010, con la disidencia del general Kayumba, las tensiones tomaron otro cariz, con un visible deterioro de la coherencia interna del grupo en el poder y con la amenaza de su desintegración.

En Burundi, el ciclo electoral comenzó el 24 de mayo de 2010 con las elecciones municipales, con victoria aplastante del partido en el poder (64%). Tras estas elecciones, se retiraron 6 de los 7 candidatos a la Presidencia, por lo que la elección presidencia se convirtió en un plebiscito a favor del presidente saliente, Pierre Nkurunziza. La oposición explicó su retirada denunciando “fraudes masivos”; las misiones de observación detectaron sí irregularidades pero no fraudes masivos. Puede considerarse que las elecciones de 2010 en Burundi han constituido un paso atrás en la democratización del país. Se ha producido un casi total monopolio del poder en todos los niveles por parte de un partido y la oposición está frustrada y marginada, con lo que ha aumentado considerablemente el potencial de violencia.

En RDC, se celebraron las elecciones presidenciales y legislativas el 28 de noviembre. Se denunciaron graves irregularidades y las semanas posteriores fueron tensas. El tiempo desactivó la bomba y la explosividad fue borrándose gradualmente, ante la imposibilidad de anularlas o de volver a contar los votos (esto último técnicamente casi imposible). Los primeros meses de 2012, los diversos actores políticos (excepto Tshisekedi), a pesar de que todo el mundo convenía en que las elecciones eran muy discutibles, aceptaron los resultados proclamados.

En este informe tratamos de analizar cómo en los tres países el régimen organizó unas elecciones formales a la par que mantenía un control máximo de la maquinaria electoral y de la opinión pública. Señalaremos también cómo la oposición no ha sido capaz de crear la imagen de estar presta a tomar el relevo; los partidos opositores eran débiles o muy divididos y con unas armas muy desiguales frete a las del poder. En Ruanda, la oposición fue eliminada meses antes; en Burundi, abandonó el terreno tras las elecciones municipales y en el Congo no fue capaz de capitalizar el hastío generalizado.
Veremos que el déficit democrático en los tres procesos ha estado a la base de una pérdida de cohesión de las fuerzas armadas y de un riesgo de recrudescencia de la violencia. La huida de Kayumba y de Agathon Rwasa, así como el impacto del clima electoral en el este del Congo se han convertido en factores de desestabilización.

La ausencia de una verdadera oposición parlamentaria, en un contexto en que la oposición es algo marginal, coloca a la sociedad civil en situación difícil, ya que se convierte, junto con los medios de comunicación, en uno de los raros espacios para las opiniones divergentes y críticas con el poder y, en consecuencia en objetivo de represión.
Las irregularidades, las trampas, las intimidaciones, la violencia, han minado la credibilidad y legitimidad de la arquitectura institucional, lo que puede tener como consecuencia que las poblaciones pierdan totalmente la confianza en las elecciones.

Los socios internacionales, incluyendo a la UE, no han tenido un impacto importante a favor de la democracia. Insisten mucho en que se celebren elecciones pero aceptan demasiadas prácticas no democráticas. Si queremos que los ciudadanos crean en las elecciones, hay que garantizar que sean creíbles. Hay que preocuparse por la limpieza de los procesos, pero también por transforma el paisaje político, desmilitarizarlo, reforzar los partidos, de los parlamentos. Es urgente preparar el terreno para que las comunidades locales se apropien de los valores y conceptos de la democracia a través de la educación cívica y del apoyo a la sociedad civil.

Autor

  • Berwouts, Kris

    Nació en la localidad belga de Gante, en 1963, en cuya universidsad realizó un doctorado en linguística e historia africana. Fue director de EurAc, de 2007 a enero de 2012, coordinador de Africa 11. 11. 11 (Plataforma belga del movimiento Norte - Sur) y trabajó también para la Cruz Roja belga y el Servicio Civil Internacional.Es autor de la obra Congo's Violent Peace: Conflict and Struggle since the Great African War, publicado en la serie African Arguments, además de haber escrito numerosos artículos. Actualmente es analista y consultor independiente sobre conflictos, seguridad y democracia en África Central.

    @krisberwouts

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