Bobi Wine, estrella del pop y líder político opositor en Uganda, fue detenido ayer por la policía antes de ofrecer un concierto. Las fuerzas de seguridad del estado cancelaron previamente el espectáculo y expulsaron a los fans presentes en el recinto. El público reaccionó lanzando piedras contra la policía, lo cual fue respondido mediante el uso de gases lacrimógenos.

Wine, además de ser la sensación musical a nivel local, es uno de los principales candidatos a quitar el puesto al veterano presidente Yoweri Museveni. Wine fue sacado de su automóvil cuando se dirigía a la sala de conciertos en el sur de Kampala. Más tarde, fue liberado y la policía lo dejó en su domicilio.

“Me arrestaron como a un terrorista. Me rompieron la mano y me empujaron en un vehículo», protestó Wine, quien ante una multitud de simpatizantes y con su distintiva boina roja, exhortó: “Manteneos firmes, estamos ganando esta guerra. Cada día que pasa ayuda a nuestro objetivo de terminar con la dictadura».

Las razones del arresto no están del todo claras. Según el portavoz de la policía de Kampala, Patric Onyango, Wine fue detenido y llevado a su casa “para poder hablar con él y para que su equipo y él aprendan a respetar la ley”. Lo que sí está claro es que la policía canceló el domingo el muy esperado show de Wine citando “preocupaciones de seguridad” y por ello se cerraron las carreteras que conducían al lugar.

Fuente: Capitalfm

[Traducción y edición, Javier Ramos López]

[Fundación Sur]

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