La discriminación étnico-racial nos empobrece a todos

21/03/2016 | Editorial

Hoy 21 de marzo recordamos el día internacional para la erradicación de la discriminación racial, y podemos incluir otros tipos de discriminación.

Las sociedades y líderes sabios y responsables buscan siempre acoger e integrar las diversidades de raza, lengua, cultura y religión. Saben que esta integración conduce a un desarrollo más completo y sostenible. Lo observamos en el Reino Unido, Francia, EEUU, Suráfrica, etc.

Los líderes y sociedades más exclusivistas y radicalizadas tienden a rechazar la diversidad, por miedo a perder su identidad y privilegios. Esto conduce al empobrecimiento y al aislamiento, como lo vemos en Siria, Irán, Libia, Zimbabue, etc.

Deseo analizar brevemente dos tipos de discriminación, que son particularmente graves en el África actual y en el mundo: la discriminación étnico-racial y la discriminación de género.

Este exclusivismo del prójimo, sea étnico, de género, económico, político, etc. condena a la mayoría de la humanidad al sufrimiento continuo en la pobreza, la emigración, la inseguridad, la violencia y a una vida indigna del ser humano.

Este descarte o discriminación que sufre la mayoría de la familia humana, lo hace por causa del abuso del poder, de la dictadura del dinero y de la erosión sistemática de los valores humanos y sociales más universales.

La discriminación étnico-racial:

Esta discriminación étnico-racial la estamos palpando estos días en tres síntomas relevantes y reveladores:

– La discriminación y rechazo de los inmigrantes sirios y africanos, de las fronteras europeas.

El nuevo acuerdo de la UE con Turquía, en relación con los inmigrantes sirios y otros, viola el derecho de asilo, es inhumano e injusto, encaminando los inmigrantes que llegan por la ruta de los Balcanes, a Turquía, puesto que Grecia está saturada y los otros países europeos los rechazan.

A cambio de acoger a los inmigrantes sirios en Turquía, la UE se comprometerá con Turquía para aumentar la ayuda económica y facilitar los movimientos y aproximación entre Turquía y la UE.

Los grandes poderes, además de hacer la vida imposible en muchos países con recursos de Oriente Medio y África, por causa de las guerras que causamos, luego les cerramos las puertas de refugio, y a lo sumo les damos alguna ayuda ocasional.

– La discriminación étnica de los Hutus, como Victoire Ingabire, en Ruanda.

Ruanda se ha retirado de la Corte Africana de Derechos Humanos, alegando que Ruanda cuenta ahora con tribunales competentes. La razón real es que la Corte Africana de Arusha convocó al gobierno de Ruanda a una audiencia sobre un caso presentado por la líder de la oposición Victoire Ingabire, acusando al gobierno de violar sus derechos y libertades, así como los de miles de ciudadanos hutus.

Victoire sufre injustamente el encarcelamiento arbitrario del régimen de Kigali, desde 2010, que le ha condenado a 15 años de cárcel.

Ella es una de las muchas personas de la oposición encarceladas por razones étnicas, ante el silencio cómplice de algunos gobiernos locales y extranjeros.

– La discriminación racial de africanos, como Massar Ba, en Argentina y países de Suramérica.

El activista de DD.HH senegalés: Massar Ba ha sido asesinado en Argentina. La Asociación de Senegaleses en Argentina pide aclaraciones al Ministerio Público de la Defensa, debido al recrudecimiento de la violencia contra migrantes y vendedores ambulantes por parte de la policía.

Este es un caso de violencia institucional contra un líder de la comunidad senegalesa, dijo Florencia Mazzadi, de la asociación DDHH de los migrantes.

Massar era un defensor de los DD.HH entre las minorías más discriminadas en Argentina, y en otros países vecinos.

Curiosamente, África Fundación Sur fue el primer portal de conocimiento sobre África en dar esta noticia, que luego a través de las Redes Sociales, alcanzó las 60.000 visitas los días 11 y 12 de marzo 2016.

La discriminación de género:

Esta discriminación y humillación de la mujer, por desgracia demasiado familiar y universal, muestra dos focos de especial crudeza e ignominia estos días, en África: en el Sur de Sudan y en la región de Kivu (RDC).

La crueldad está llegando a limites sin precedentes: “los soldados violan a las mujeres a modo de salario”, y por tanto con toda impunidad.

Esta discriminación de género se manifiesta en múltiples abusos de la dignidad humana de la mujer: mutilación genital, (en Mauritania hasta el 98% de la niñas lo sufren), matrimonios precoces y forzados, violencia doméstica, violación y varias formas sociales de esclavitud que todavía sufren las mujeres africanas.

En algunas regiones, como en Sudan del Sur y en la región este de la RDC (Kivu norte y sur), la ONU afirma, que” los gobiernos locales permiten a los soldados violar a las mujeres, a modo de salario”.

Los hechos que se relatan van más allá de la comprensión humana. Según la ONU, en estas regiones, “la situación de los abusos de DD.HH está entre las más horribles en el mundo, con la utilización masiva de la violación como instrumento de terror y como arma de guerra”, explicó el alto comisionado de la ONU: Zeid Ra’ad al Husssein.

En Sudan del Sur, más de 2.3 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y las personas más vulnerables son siempre las mujeres y las niñas. Si vamos a las regiones de Kivu, más de 6 millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus tierras y hogares, con todo lo que esto significa.

Estas formas tan crueles de discriminación, e incluso opresión, tienen lugar ante la mirada cómplice, la pasividad y la indiferencia de la comunidad internacional.

En el mudo, 65 millones de niñas están privadas del derecho a la educación. Además, según Unesco, casi 16 millones de niñas de entre seis y 11 años nunca irán a la escuela primaria, en comparación con ocho millones de niños. La discriminación de género continua en sus múltiples formas.

A través de la sensibilización e información contrastada, en África Fundación Sur, deseamos seguir educando y motivando a la sociedad y sus líderes, para superar toda forma de discriminación: racial, de género, política, económica, cultural, etc. y para promover cada día una mayor integración social y unas relaciones más respetuosas y solidarias.

África Fundación Sur desea a todos sus amigos-as, colaboradores-as y a todos los que nos siguen a través de la Web, y Redes Sociales, un buen descanso y unas Felices Fiestas de Pascua.

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