Washington, Londres y Bruselas parecen mantener una conspiración de silencio en torno a muchos crímenes de guerra: en Etiopia (Ogaden) por Melea Zenawi, en la R.D. del Congo (Kivu) por Ruanda, Kinshasa y Uganda, y en Sudan por El Bashir, etc.
¿Por qué hablan tanto de Derechos Humanos y Responsabilidad, cuando intentan ocultar sistemáticamente genocidios como el de la R.D. del Congo y crímenes de guerra como los de Sudan y Etiopia?
Según “Le Monde” (23.5.12) dos criminales de guerra: L.Nkunda y J. Mutebusi residen en Ruanda sin ser perseguidos por la justicia. Ambos han sido el brazo armado de Ruanda en el este de la RD del Congo. Lo mismo sigue haciendo B.Ntaganda aunque estè reclamado por la Corte Penal Internacional (CPI). Informes de expertos demuestran las actividades criminales de B.Ntaganda, asi como el tráfico de minerales entre la RDC y Ruanda. Los disturbios y violencia en Kivu norte han sido también organizados por Ntaganda. Unas 300.000 personas han sido recientemente desplazadas en la región de Kivu. ¿A beneficio de quien?. Para proteger a Ntaganda con impunidad, Ruanda y Kinshasa están colocando ahora a S.Makenga para continuar con la misma tarea de violencia y saqueo.
A estas actividades criminales teniendo lugar en la RDC, responden los gobernantes de EEUU y Europa con silencio, porque tanto ellos como los gobiernos de Ruanda, Uganda, Kinshasa se siguen enriqueciendo desde 1994, a costa de millones de vidas humanas inocentes.
La ONU sigue perdiendo credibilidad por su política de doble rasero en relación con los crímenes y el saqueo que siguen teniendo lugar en el este de la RDC. Por un lado, publicó su propio informe “Mapping Report” (1.10.10) en el que se acusaba a la actual cúpula en el gobierno de Ruanda de haber cometido crímenes en masa en la RDC, que si llegasen a un tribunal podrían considerarse “genocidio”. Desde 1993 hasta hoy, varios informes como: ”Editons Sources du Nile” (14.2.12) publican la escalofriante cifra de unos 8 millones de personas eliminadas.
Por otro lado la ONU, con su silencio, permite al dictador de Ruanda y otros seguir orquestando crímenes y saqueos en la RDC, y encarcelar a la pacifista Victoire Ingabire, periodistas, opositores, operado con toda impunidad.
Para colmo de hipocresía, la Unión Africana, India etc. proponen a Ruanda como miembro para el Consejo de Seguridad de la ONU. Si la ONU acepta a Ruanda en su consejo de seguridad, perdería totalmente la poca credibilidad internacional que todavía sostiene.
Junto con muchos gobiernos, la ONU va camino de convertirse en “organización irrelevante”, además de costosa, por causa de su falta de integridad.
En un mundo globalizado necesitamos una autoridad global, estilo de ONU, pero con un comportamiento muy responsable, imparcial e integro.
