Por esclavitudes modernas entendemos: tráfico de personas (mujeres), niños soldados, tráfico de drogas, ventas secretas de armamentos, acaparamiento de tierras, acuerdos económicos injustos, corrupción masiva, etc.
Es evidente que la transformación de un pueblo o sociedad significa un esfuerzo conjunto de generaciones. La toma de conciencia, educación integral y motivación de un pueblo requiere un largo proceso para dar frutos.
Conviene recordar que las esclavitudes modernas son causadas ante todo por la pobreza, y la pobreza es provocada especialmente por la mala gestión del poder.
La interacción de los pueblos en nuestra sociedad global, para construir un mundo más justo, (o injusto), es constante y necesaria para conseguir resultados sostenibles.
Algunos piensan que la superación de las esclavitudes, tanto en África como en otros continentes, es utópica, a no ser que cambiemos la naturaleza humana, lo cual, gracias a Dios, no está en nuestras manos. Algunos incluso mantienen una visión un tanto jansenista (pesimista) de la vida, del ser humano y del mundo.
Estoy convencido de que la alternativa para una transformación social y la construcción de un mundo más humano y justo, no solamente es posible sino que estamos en proceso de conseguir un mundo mejor, aquí y en África.
Las revoluciones árabes son un ejemplo reciente de que la transformación social es posible y suponen un motivo más de esperanza.
¿Por qué esta convicción? Por tres razones fundamentales:
? Este sistema capitalista opresor ha nacido en la mente humana, por tanto la solución está también en el ser humano. Si hemos construido estructuras injustas, podemos reemplazarlas por otras más justas. Ho hay sistema que haya desafiado los siglos. De hecho constatamos hoy: la creación de bancos éticos, comercio justo y nuevos foros sociales y medioambientales. Poner parches al sistema capitalista actual no serviría de nada. Deseamos una Política y Estructuras para el Bien Común. Esto es tarea nuestra.
? Mirando a la historia constatamos como han existido jefes opresores, pero también han existido y siguen existiendo, lideres íntegros que sellaron con su testimonio y hasta con su vida, el mundo y reino que deseamos construir, y por el que seguimos trabajando. Ciertamente necesitamos la participación activa y organizada de la sociedad para superar el mal y violencia estructural con una nueva solidaridad. Es necesario elegir profesionales responsables para la gestión pública, fuera del sistema político actual.
? Para los creyentes, existe además la certeza en la Fe, de que no trabajamos solos. El Espíritu de Dios está con nosotros, para liberar a los cautivos, rescatar a los pobres y para construir un mundo más justo y solidario, donde todos los seres humanos puedan vivir con dignidad y gozar del bienestar social. Este mundo nunca será perfecto, pero sí puede ser más humano y pacífico. Podemos superar el mal con el Bien!
Nos hace falta despertar y participar activa y responsablemente en la creación de un bienestar social. Esta tarea sobrepasa a todos los partidos políticos actuales, porque no están a la altura requerida. Este es un reto para la sociedad. Lo primero que una sociedad capacitada y organizada debería hacer es “jubilar” a la mayoría de los políticos, sindicatos y banqueros actuales, para que se enfrenten a la justicia, devuelvan lo “robado”, y para comenzar de nuevo con líderes más profesionales e íntegros.
Si dejamos que el ser humano siga siendo marginado, estaremos todos sometidos a la esclavitud.
Si seguimos capacitando a las personas esclavizadas hoy, ellas mismas se liberarán de los opresores, para vivir en dignidad.
