El presidente de la República, Su Excelencia Amadou Toumani Touré, fue el 25 de octubre, el invitado de la emisión “Y si me dijese toda la verdad” de la cadena de televisión francófona TV5 Mundo, con ocasión de los diez años de esta emisión, presentada por Dénise Epote. En una entrevista exclusiva con esta compañera, ATT (Amadou Toumani Touré) ha hablado sobre el reciente Código de las personas y la familia, reenviado en segunda lectura a los diputados, después de toda la agitación suscitada por la adopción del texto. El régimen de consenso político que ha instaurado desde 2002, la próxima cumbre sobre la franja sahelo- sahariana, la crisis guineana, el cambio climático sobre el que hay una importante cumbre el próximo diciembre en Copenhague (Dinamarca) figuran entre los asunto evocados en el transcurso de esta emisión.
Considerado como un buen apóstol de la democracia en África, el presidente ATT se ha pronunciado sobre lo que Dénise Epote ha llamado “el injerto ATT que ha calado tan bien”. A la pregunta de cómo el régimen atípico, la política de consenso ha podido tener tanto éxito, ATT no se ha hecho de rogar. “Es necesario remontarse al lugar donde nací. Nací en una región del centro de Malí, alrededor de lo que se llama la Venecia maliense, Mopti. En nuestra región, el individuo desaparece delante de la comunidad. Nosotros lo llamamos la casa del padre. Todo se hace en común, vamos al colegio en común, nos casamos en común. Es un estado de espíritu. Todo se comparte… Como segundo factor, es necesario señalar que durante diez años he hecho de mediador, emisario en diferentes países. Pero por todas partes, me he dado cuenta de que uno de los factores esenciales de la división, de los conflictos, es el poder. Y me he dicho por qué no compartir el poder y hacerlo de manera que cada uno tenga que gestionar una parte pero desde nuestras diferencias. Razón por la cual he propuesto a la clase política maliense y a los malienses la gestión consensual del poder… El último factor es que yo era un presidente de la República sin partido político, pero sostenido por las formaciones políticas y las asociaciones…” Esto, según él, ha facilitado la llamada de los diferentes recursos humanos a trabajar para el desarrollo de Malí, pese las divergencias.
A propósito de este particularidad maliense: “ni un régimen totalmente presidencial, ni un régimen totalmente parlamentario, pero todo un nuevo régimen el que usted ha creado…”, ATT se felicita de su invención y del genio maliense.
Y el inquilino del Palacio de Koulouba declara que él continúa siendo firmemente partidario de este consenso. ¿Es exportable? ¿Y por qué no? “Reconozcamos que podríamos exportar este sistema teniendo en cuenta sus valores propios” ha dejado entender. En todo caso, dice el presidente Touré, los modelos de este género se establecen cada vez más; incluso en Occidente.
Respecto al Código de personas y familia que ha saltado a los titulares recientemente, el jefe de Estado invoca un déficit de comunicación, un clima de intoxicación y de incomprensión que le han obligado a reenviar el documento a una segunda lectura ante la asamblea nacional. El presidente “¿ha reculado para darles gusto a los políticos- religiosos o para desbaratar una desestabilización que no dice su nombre?”
Ha sido cuestión de una gestión “del Código de rumores, en vez del Código de las personas y la familia”. Para ATT, que ha recordado la evolución desde 1962 del texto base que regula la familia, el parentesco en Malí, no se trata de un retroceso, sino de una parada para entenderse mejor. “La intoxicación se ha impuesto sobre el Código real. De los 1143 artículos que componen el texto, sólo hay tres o cuatro artículos que plantean ciertas dificultades…”.
Ha explicado que este reenvío para una nueva deliberación, que tendrá lugar, no en abril 2010 sino un poco más tarde, no es un retroceso frente a los derechos de la mujer ni un sacrificio de los derechos de las mujeres en aras de la real política”.
Porque el Código no es el Código de las mujeres, sino el de las personas y la familia. “Hay que reconocer que yo estaba solo frente a mi código; no había muchas personas a mi alrededor para ayudarme en este duro periodo”.
Sobre el plan de seguridad y en relación con la paz en la banda sahel- sahariana, el presidente de la república insiste sobre la dimensión transnacional del problema. Es por ello que él cree en las virtudes de la concertación para definir los marcos estratégicos de colaboración aptos para encontrar soluciones perennes a la cuestión de la inseguridad.
La política del bastón, es decir, la de la firmeza se ha puesto en marcha, sobretodo “frente a los salafistas y la de la flexibilidad en cierta medida frente a los malienses (tuaregs) que han tomado las armas” no impide la concertación. Y el jefe del Estado recuerda que el proceso de organización de la próxima cumbre está en marcha. “El acuerdo de Argelia no está caduco como algunos podrían hacer creer.” ha precisado.
Otros asuntos como la crisis guineana han sido evocados. ATT ha insistido en la proximidad entre Guinea y Malí, él ha preconizado el diálogo frente al régimen de Conakry. “Actualmente, hay una polémica que se está instaurando en torno a Guinea, en relación a la mediación de la CEDEAO. Necesitamos serenidad.” ATT también ha evocado otros asuntos candentes como el cambio climático recordando el principio de contaminador pagador.
Fuente: TV5 Mundo.
Publicado en L’Indépendant, Mali, el 26 de octubre de 2009.
Traducido por Ana Dols, para Fundación Sur.
