China al asalto de África

8/01/2007 | Opinión

ALGO DE HISTORIA

Me preguntaban después de una charla sobre la situación actual de África. ¿Desde cuándo están los chinos en África? ¿De dónde vienen? ¿Cuántos son? La respuesta más prudente, es responder: Depende… Si nos fiamos de algunas fuentes antiguas, ellas atestan la presencia de chinos en Egipto desde el siglo X antes de Cristo. Eran comerciantes, que venían por tierra con sus caravanas, siguiendo la ruta de la seda.
Durante 15 siglos (del II a.C. al XIII d.C.) los chinos recorren todo el norte mediterráneo del Continente: Vienen en caravanas y comercian la seda y las especias. Bajo la dinastía mongol de los Yuan (1276-1368) navegantes chinos venidos por el Océano Índico, atravesando el Golfo Pérsico, se establecen en la costa oriental de África, en Mogadiscio. Pero la expansión de los comerciantes chinos sufre con la llegada de los navegantes portugueses. La flota de Vasco de Gama, después de haber circunnavegado África, es conducida por un piloto musulmán, contratado en Mozambique, hasta la India. Bastantes años más tarde, cuando los lusitanos se establecen y arraigan en Macao, los chinos vuelven a las costas orientales africanas.

Cuando yo llegué a Mozambique en 1956, encontré en la ciudad de Beira, el puerto más importante del centro del país, una colonia china de cerca de un millar de familias, en su mayoría venidas de Macao, pero también de China comunista y de Taiwán. Poseían pequeñas tiendas y algunos puestos de venta de pescados en el mercado. Además de poseer los clásicos restaurantes chinos en los diversos barrios de la ciudad. Estaban bastante integrados, como ciudadanos portugueses que eran los macaenses; no se metían en política y no llegaban a constituir un gueto, aunque era raro que esposaran personas de otras razas.

Después de la abolición de la esclavitud en el siglo XIX, los ingleses y franceses reclutaban trabajadores chinos para trabajar en las plantaciones de caña de azúcar y después los trajeron para construir las primeras líneas de ferrocarriles africanos. Se dio el caso de que Francia tenía un penal en Gabón, donde purgaban sus condenas los criminales de derecho común de Cochinchina, de Annam y de Tonkin. Al ser liberados, se quedaban por allí y fundaban familias mixtas. Entre los gaboneses ilustres se cuenta el ex ministro de Asuntos Exteriores, Jean Ping, cuyo padre era chino y su madre gabonesa. Aprendió el “mandarín” y era muy bien recibido en los medios diplomáticos de Pekín, obteniendo los primeros contratos chinos para su país.

A partir de 1950, los nuevos inmigrantes chinos se incorporaban a los descendientes de las comunidades chinas arraigadas en los diversos países. Su longevidad en África depende de su gran capacidad de adaptación, de su ardor en el trabajo y de la gran discreción
Mantenida en las cuestiones políticas de cada nación. Desde el 1990, los ciudadanos de China continental y en menor escala de Taiwán, al abrir China sus fronteras, muchos miles de ciudadanos se dirigen a África. No todos son comerciantes honrados, entre ellos encontramos elementos de las poderosas mafias chinas y taiwanesas.

¿Cuántos son? Se habla de alrededor de medio millón, contando los nacidos en África. De éstos, unos 150 000 tienen pasaporte chino. A partir del año 1978, China se retiró bastante de África. Los técnicos chinos venían a colaborar puntualmente con ciertos gobiernos, para realizar algunos proyectos concretos y una vez realizados se marchaban. Por ejemplo, en Burkina Faso (entonces Alto Volta) se encargaron del hospital de Kudugu, 3ª ciudad del país. También en la capital, Uagadugú construyeron el Estadio Nacional y se lo regalaron al pueblo. Desde la caída del muro de Berlín y la desintegración de la URSS, los chinos se van retirando a medida que terminaban los proyectos, que llevaban entre manos. Como dijimos más arriba, las nuevas oleadas se producen a partir de la década de los 90 del siglo pasado.

En esa década, después de la abolición del apartheid, aparecen en Suráfrica algunos elementos de las mafias chinas más famosas: La más poderosa es la Sun Yee On , pero la taiwanesa Table Mountein Gang, aunque menos organizada, no se queda atrás. Sus actividades se centran esencialmente en el tráfico ilegal de “abalone”, una variedad de molusco marino muy apreciado en China y abundante en las aguas surafricanas, pero cuyo comercio está reglamentado. Desde 2000, practican el narcotráfico, la prostitución y el blanqueo de capitales.

Los Archivos nacionales de África del Sur conservan documentos que hablan de la llegada de los primeros emigrantes chinos al mismo tiempo que los holandeses, en 1650, estableciéndose en la región del Cabo de Buena Esperanza. Durante la dominación inglesa, muchos chinos trabajaron en las minas de oro del Transvaal. Dando origen a partir de 1910, a las comunidades de Johannesburgo y Port Elizabeth.

LA NUEVA POLÍTICA CHINA

Desde que China descubre que se puede ser “comunista y capitalista” al mismo tiempo, el pueblo chino se lanza con frenesí a la sociedad de consumo y lo primero que necesita son materias primas, en especial el petróleo. De aquí arranca esa nueva manera de abordar África.

Las visitas se suceden con frecuencia, baste recordar la gira del primer ministro Wen Yiabao en junio de 2006. Visitó siete países: Egipto, Ghana, RD del Congo, Angola, Suráfrica, Tanzania y Uganda. Fue durante esta visita que se fue concretizando el Foro CHINA – ÁFRICA, celebrado del 3 al 5 de noviembre pasado en Beijing. Allí estuvieron representadas 48 naciones africanas.

Faltaron a la cita cinco países, que son el coto privado de los EE. UU. en África: Gambia, Malaui, Burkina Faso, Suazilandia y Santo Tomé y Príncipe, cada uno por razones particulares.

Varios líderes africanos llegaron a China con suficiente antelación, para realizar contactos bilaterales y algún hermanamiento, como la presidenta de Liberia, que durante su visita a la ciudad de Shenzhen, expresó al alcalde su esperanza de poder establecer un hermanamiento entre su país y su ciudad, una de las mejor administradas y aprender de la experiencia china como estimular la economía local. Ellen Johnson Sirleaf fue la encargada de pronunciar al discurso de apertura del Foro, Lo mismo hizo el primer ministro angoleño, Fernando dos Santos, que subrayó la importancia de la cooperación chino – angoleña en esta etapa de reconstrucción de su país, para garantizar la estabilidad económica y el desarrollo global.

En Shenzhen se ubica la Compañía “Huawei Technologie”, uno de los mayores abastecedores mundiales de equipos informáticos, que fue visitada por Fernando dos Santos.

Como conclusión de este encuentro, se estableció que el Foro se celebrará cada tres años. Siendo el próximo en 2009, en el Cairo.
El presidente chino, Hu Yintao, declaró a la prensa que, “los líderes africanos, que asistieron a la cumbre han tenido un buen intercambio de puntos de vista sobre cómo desarrollar una nueva Asociación estratégica entre China y África.” Por otro lado, un portavoz del gobierno chino calificó esta cumbre, “como el mayor evento internacional de China desde la fundación del régimen comunista en 1949.”

EL MODELO CHINO DE COOPERACIÓN

Lo que más agrada a ciertos gobernantes africanos es que China establece su cooperación sin ninguna condición previa con relación a la buena gobernabilidad, transparencia administrativa, respeto de los derechos humanos, pluripartidismo, etc… como exige la UE . Esto agrada a Mugabe de Zimbabue y al gobierno islamista de Jartum, que atiza el conflicto de Darfur. Por eso los analista creen que esta cumbre además de generar nuevas promesas sobre la reducción de la Deuda por parte de China, de becas para los estudiantes y un esfuerzo de reconstrucción de las infraestructuras del Continente, los grupos de Defensa de los Derechos Humanos recelan que, bajo pretexto de no interferir en los asuntos internos de cada país, China cierre los ojos ante los abusos e injusticias de gobiernos como Zimbabue, Sudán y otros.

Los presidentes de Sudán, Omar Hasan el-Bachir y el de Zimbabue, Robert Mugabe participaron en la cumbre.

China ha firmado acuerdos con 10 países africanos por 1.900 millones de $ USA. Por otro lado, ha prometido doblar su ayuda al Continente y distribuir 5.000 millones de $ USA en préstamos y créditos blandos, contra garantías del fornecimiento de materias primas, como el petróleo, las maderas y los minerales.

ALGUNOS PROYECTOS EN CURSO

En Angola, están reconstruyendo los 1.300 kms. del ferrocarril que une el puerto de Benguela, en el Atlántico, hasta la zona rica en minerales, vecina de Katanga. Además los chinos están rehabilitando las carreteras y los institutos técnicos. Contrapartida: El petróleo.

En Ghana, construcción de una represa hidroeléctrica en el norte, de 400 megavatios por un coste de 600 millones de $ US. Contrapartida: Café, cacao, maderas y oro.

En Gabón, ferrocarril y la mayor parte de las instalaciones de los puertos por 3.000 millones de $ US en contrapartida Gabón exportará a China, hierro y oro.

En Zambia, construcción de un alto horno para fundición de cobre (150.000 tns/año) cuyo coste de 200 millones de $US. será reembolsado con el cobre fundido.

Benín es gran productor de algodón (350.000 tns/año), anacardos, piña y aceite de palma. Los proyectos visan la transformación de esos productos, antes de ser exportados.

La Compañía CNOOC de China va a adquirir en Nigeria el 45% del yacimiento de petróleo y gas natural de Akpo por 2 billones de $ US Será la adquisición mayor realizada por una sociedad china en el extranjero. La propietaria es la desconocida compañía nigeriana South Atlantic Petroleum, controlada por el ex ministro de Defensa nigeriano, Theophilus Danyuna. China adquiere algunos derechos de exploración y de explotación.

Con Camerún, China ha concluido, en el espacio de 35 años de cooperación, unos 20 acuerdos. Siendo el primer socio comercial de Camerún en Asia. Este país del Golfo de Guinea importa de China: Vehículos militares, tractores, quincallería, tabaco, maquinaria pesada, textiles y confección, calzado, clavos de hierro y de acero, material de oficina, etc… Exportando: Maderas sin trabajar y en tablones, contrachapados, caucho bruto, petróleo, algodón, café y cacao. Además financia una presa y usina hidroeléctrica en Lagdo que alimentará todo el norte y varios complejos sanitarios: Hospitales, maternidades y pediátricos.

El país que se lleva la palma es Mauritania, que estableció relaciones diplomáticas hace más de 40 años y que está beneficiando de la asistencia china en casi todos los sectores de su economía. Actualmente, los chinos están construyendo el aeropuerto internacional de Nuakchot, por 170 millones de $ US, el sector de la pesca está muy penetrado por los chinos, que poseen una flota de 100 barcos, unos 1000 marinos y pescadores chinos, que abastecen 4 factorías de tratamiento de pescado: congelación, salazón y conservas. También están muy presentes en el sector hotelero y en el de la construcción. Toda la esperanza está puesta en las prospecciones petroleras, tanto en tierra como “of shore”.

NO TODOS LOS CHINOS SON IGUALES EN ÁFRICA

Los chinos clasifican a sus compatriotas, que emigran al Continente Africano con diversos nombres. He aquí los mismos y las diferencias que subrayan.

Los HUAGONGS son campesinos sin tierra o ciudadanos en paro, que vinieron a África ya en la era colonial como mozos de granjas u obreros (peones sin especialidad) para los grandes trabajos coloniales. Los que llegaron al principio del siglo XX regresaron casi todos. Así lo hicieron los mineros que trabajaban en la extracción del oro en el Transvaal, en Suráfrica.

Los HUAQUIAOS son todos los emigrantes que vinieron a África por intereses personales o familiares. Esta comunidad a sido “recuperada” por los nacionalistas. Pekín los considera una porción intangible de la nación. Corresponden a esa protección de China fuera de sus fronteras, con la lealtad a su patria.

Los HUAYÍS son descendientes de chinos, pero que han optado por la nacionalidad del país de acogida, sean nacidos en China o fuera. Estos nunca pueden ser considerados HUAQUIAOS (ciudadanos chinos residentes fuera).

CONCLUSIÓN

África se encuentra en este momento como una muchacha que tiene dos novios. Por un lado China, gigante que la impresiona por su rápido desarrollo, que ha pasado de la pobreza “comunista” a una prosperidad, que aún no siendo generalizada, pues existen enormes diferencias entre los habitantes de las ciudades y los campesinos, va disminuyendo a ritmo acelerado. Por otro lado, China es poco exigente en las condiciones previas a la cooperación.

Este “novio” tiene además el encanto de una civilización refinada, una de las culturas más antiguas de la Humanidad, con una filosofía de la vida, el Budismo, que predica la no- violencia. Aunque de hecho, desde que impera el comunismo, la violencia está muy presente.

El otro novio es rico, pero muy imbuido de sí mismo. Por donde pasa va arrasando y se cree el dueño del mundo en todas partes. Su prosperidad ¿durará mucho tiempo? Depende terriblemente de las materias primas de los demás, en particular para el petróleo. Por otro lado, tanto la UE como Rusia, no son sus “siervos” y sus “antiguos aliados”, los países árabes, se van distanciando por causa de la política americana de protección exagerada de Israel y por la actitud asumida frente al terrorismo islamista y sus intervenciones en Afganistán e Irak.

África siempre fue considerada por los norteamericanos como el pariente pobre, el mendigo que puede absorber todos nuestros excedentes de productos alimentarios: Leche en polvo, mantequilla, maíz transgénico, etc… África, la madre de sus esclavos del Sur.

Por eso, la nueva África, si de verdad pudiera escoger libremente, sin presiones de amigos o enemigos, creo sinceramente que África se casaría con los chinos… A ver qué pasa.

Matrimonio de experiencia. Si no resulta como se esperaba, siempre se puede hacer marcha atrás. Porque a los americanos, África ya los conoce y no creo que la haya ido muy bien cada vez que “flirteó” con ellos. Además, está “la rueda de los imperios” que no para de dar vueltas y parece que ahora sus agujas marcan el Oriente, que es por donde nace el sol.

Antonio José Molina Molina

Secretario General de la Fundación Sur

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster