ARMAS PARA ÁFRICA

26/03/2012 | Editorial

La proliferación de armas ligeras en África es una de las causas principales de las muertes en el continente africano. Hoy se puede comprar en África un AK-47 por tan solo $ 12. El constante aumento de conflictos armados dificulta y hasta imposibilita su recuperación económica, cultural y social.

Las causas más importantes de estos conflictos armados son la explotación de los recursos naturales y minerales como el coltan, diamantes, oíl etc. y el interés de países extranjeros en controlar el origen de los recursos, los medios y los mercados.

Los gobiernos europeos democráticos son legales pero no siempre son legítimos en los negocios que realizan. Un ejemplo concreto es la venta de armas. Nuestros gobiernos pueden obrar legalmente en este negocio de armas, pero no obran legítimamente, porque para ello necesitan el apoyo y aprobación explicita del pueblo. La sociedad española no conoce, ni por tanto ha ratificado estas ventas de armas.

¿Sabe la sociedad española que los viejos rifles del ejército español están desparramados entre los pastores Turkana del noroeste de Kenia? Los vimos en 2003.

Según “El País” del 21.3.12, la inversión militar española de 2011 volvió a aumentar en un 2.5%. El negocio militar no conoce crisis.

Pese al estancamiento de su economía, España ha logrado triplicar sus ganancias armamentistas en apenas cinco años, confirmándose como el séptimo exportador mundial de armamento convencional. La UE es uno de los mayores exportadores de armas a África, según AEFJN (África Europa Faith Justice Network), con sede en Bruselas.

Estos negocios “secretos” sobre armas son ilegítimos porque les falta el respaldo del único depositario del poder: el pueblo. Tales negocios son también injustos porque en lugar de promover el Bien Común, solo buscan el mayor lucro posible, aun privando a los demás de lo necesario para una vida digna y poniendo su vida en peligro.

Al mismo tiempo que nuestros gobiernos incrementan la inversión en armas, siguen reduciendo la cooperación al desarrollo integral de los Países del Sur. Esto es inhumano.

Esta forma de hacer política y economía confirma una vez más que lo que cuenta para nuestros líderes es el poder y el lucro, aunque practiquen retórica sobre el Bien Común y el estado de bienestar, sobre todo en tiempo de elecciones.

Los países, del hemisferio Sur, basados en su propia experiencia, apenas pueden esperar un negocio justo con los países del Norte.

El desarrollo integral de los países africanos, no necesita armas, y depende ante todo de sus propios pueblos.

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster